Hoy iniciamos un reto: En busca de la mirada del tigre de Bengala
Hoy parto rumbo a un sueño, encontrarme con el mismísimo Shere Khan. El gran antagonista de la obra de Rudyard Kipling «El libro de la Selva» es un tigre de Bengala cuyo único propósito es acabar con Mowgli y cuyo talón de aquiles está en su miedo al fuego (así como en una peculiar cojera). Esta historia llevada a los dibujos animados donde nos decían que buscáramos lo más vital (no más) ya que Mamá Naturaleza te lo da se basa en una zona real de nuestro planeta. Las selvas del corazón del Madhya Pradesh, situadas el centro de la India, hoy delimitadas en imponentes parques naturales como Kanha y Bandhavgarh, sirvieron a este escritor británico nacido en Bombay para contextualizar su narración. Hacia allá nos dirigimos con la mayor ilusión, para salir a la busca del gran tigre de Bengala y no regresar a casa hasta dar con él.
Con los tigres en India, uno de sus últimos hogares en la Tierra, nace la primera misión del #ComandoPiraña, una apuesta por los viajes desde un punto de vista de aventura en la que el hambre sólo se sacia con nuevos retos.
RUMBO A INDIA, A LA CASA DE SHERE KHAN
Hace algunos años os contaba en una pequeña gran lista de sueños por cumplir que una de las cosas que me gustaría hacer antes de morir era «mirarle a los ojos a un tigre de Bengala antes de que la estupidez humana acabe con este gran felino. Posibilidades (muy limitadas) para hacerlo las tenemos en India, Nepal y Bangladesh. Deseo con todas mis fuerzas entrar a los lugares en los que Rudyard Kipling se basó para escribir El libro de la Selva y buscar a Shere Khan».
Pues bien, en el momento en que os encontréis leyendo esto ya estaré volando lejos para adentrarme en una India muy diferente a la del Taj Mahal o Varanasi, lugares que ya tuve la ocasión de conocer hace ya algún tiempo. El corazón de Madhya Pradesh es tan salvaje y natural que a veces recuerda más a África que a la propia India. En sus bosques moran leopardos o búfalos como en la mismísima Botswana, pero cuentan con el felino más buscado y admirado, y uno de los más escurridizos, el tigre de Bengala. Animal del que el poeta británico William Blake escribiera lo siguiente:
Tigre, tigre, que te enciendes en luz
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
pudo idear tu terrible simetría?
¿En qué profundidades distantes,
en qué cielos ardió el fuego de tus ojos?
¿Con qué alas osó elevarse?
¿Qué mano osó tomar ese fuego?
El tigre de Bengala se trata de una de las especies más amenazadas de nuestro planeta. La caza, tanto permitida en algunas zonas como la furtiva, así como la destrucción de su hábitat, ha hecho menguar su población hasta niveles alarmantes. De ahí que cada vez sea más difícil poder observar en libertad (y no en un zoológico) a un animal que puede llegar a pesar nada menos que 230 kilogramos. India, Nepal, Bután, Bangladesh o el norte de Myamar son algunos de los países donde todavía mora, pero las probabilidades de verlo son bastante complicadas.
Si bien sé de algún caso de avistamiento en los difíciles Corbett Tiger Reserve (donde ya intenté ir en una ocasión pero me bastante puse enfermo y tuve que quedarme en Delhi), así como de Ranthambore en el Estado de Rajastán, una de las zonas del país con mayor densidad de tigres es el área de Madhya Pradesh conformada en la trilogía Kanha – Bandhavgarh – Pench. El objetivo es peinar lo máximo posible los dos primeros parques, Kanha y Bandhavgarh, en un 4×4 abierto y con la ayuda de expertos naturalistas que conocen mejor las lineas del tigre de Bengala que las de sus propias manos.
Hace varios años me fui de la India sin poder ver tigres. Pero esta vez regreso con el objetivo de mirarle a los ojos al mismísimo Shere Khan. Y no me planteo otra opción que no sea conseguirlo. Y capturarlo (fotográficamente hablando).
Nace el Comando Piraña
¿Y qué es eso del Comando Piraña? – os preguntaréis algunos. La historia viene de unos cuantos años atrás, cuatro exactamente. Sucedió en Buenos Aires cuando conocí en persona a Víctor Alonso (@elnomada), gran viajero al que había seguido fielmente en su vuelta al mundo con Aborígenes.net (uno de los primeros proyectos de bitácora contada en directo del que aprendí) y escritor del libro «Cartas desde el Planeta Tierra». Este tipo, con el que fue muy fácil congeniar, y que vivía al lado de la casa de la residencia de mi tío en Buenos Aires, estaba montando allí una empresa de snacks llamada Krikos que se dedicaba a llevar a los argentinos los kikos (maíz tostado) que hemos comido toda la vida de España. Y logró extender su venta en todo el país con una campaña publicitaria diferente con una actitud de aventura, de no conformarse nunca y seguir buscando retos.
Hace algunos meses este buen amigo regresó a España y el tema de los snacks derivó en la llegada de una marca que ha venido para quedarse: Piraña. Hasta el momento venden cacahuetes (maní) tostados con sabores naturales del mundo que, personalmente me ganaron desde el principio. Los tienen de wasabi, de curry masala y de barbacoa. Me gustan los tres muchísimo, pero tengo que reconocer que soy muy fan de los de wasabi, con el que han dado un enorme salto hasta llegar a traer un sabor contundente sin uso de potenciadores artificiales.
Pero no he venido a hablaros de cacahuetes tostados sino de lo que Víctor me contó de la esencia de Piraña y de un slogan que utiliza como leit motiv de vida, que es Stay Hungry. «Esto tiene un enlace claro con el espíritu viajero de descubrir, de tener nuevos retos y aventuras. Piraña y su filosofía se enlazan con los viajes de aventura de este modo, por esta filosofía de marca y porque sus productos están basados en sabores exóticos, elecciones más arriesgadas, más aventureras, no son sabores tradicionales y aburridos y además son naturales, reales. Cómo la esencia del viaje.»
Y entonces si los viajes de aventura son filosofía de marca… ¿Por qué no hacer viajes diferentes y crear retos en distintos lugares del mundo? De ese modo, mientras sorbíamos un día una sopa agriopicante y nos esperaba un ardiente kubak con gambas en un restaurante chino de Aluche, nuestro barrio, maquinamos el concepto de #ComandoPiraña. Y decidimos llevar a cabo la primera misión de empezar a contar viajes de un comando del que formarán parte «viajeros que tengan el espíritu Stay Hungry, qué tengan esa unión con la filosofía de Piraña. Aquellos que son capaces de enfrentarse a lo establecido por seguir sus pasiones, sus sueños, por muchas dificultades qué puedan existir. El comando tiene como misión crear contenido de valor, qué esté unido a la filosofía y valores de la marca.»
El primer reto, que contaremos, fotografiaremos y filmaremos, estará relacionado con salir a buscar un animal que cada vez es más complicado ver en libertad. Y nuestra idea es intentarlo una y otra vez hasta que demos con el felino. En la mismísima casa del tigre, donde Rudyard Kipling imaginó la historia de Mowgli, Balú y compañía. Nosotros nos ocuparemos de Shere Khan y de contároslo. Tenemos esperándonos en Jabalpur un 4×4 con el que recorrer Kanha y Bandhavgarh, un naturalista indio aficionado a los tigres (Mil gracias a Ignacio de Turistaloserastú.es por ayudarnos en la preparación de esta aventura tan apasionante) y, sobre todo, la actitud piraña en las venas.
Porque os aseguro que no estamos dispuestos a abandonar la India hasta que no demos con «el fuego que arde en los bosques de la noche» al que se refería William Blake.
¡Sigue nuestro reto en India!
La aventura ya ha empezado. Sólo queda disfrutar. Atentos al hashtag #ComandoPiraña en el que os hablaremos @elnomada y yo (@elrincondesele) mientras internet lo permita. También a las cuentas de Twitter y Facebook de Piraña Nuts.
Se terminaron las esperas. ¡Ya estamos rumbo a India en busca de un sueño de dientes afilados!
Sele
+ En Twitter @elrincondesele
5 Respuestas a “Hoy iniciamos un reto: En busca de la mirada del tigre de Bengala”
Suerte y disfrutar del vaje
Sele, amigo, te sigo en esta nueva aventura viajera por la India, en busca del tigre de bengala. Suerte !!
Un abrazo.
Menuda aventura, a disfrutar y conseguir el objetivo!!
Un abrazo
¿#ComandoPiraña?, «no he venido a hablaros de cacahuetes tostados»…. la verdad es que el que era un maravilloso blog de viajes hace 3 años se ha convertido en propaganda y más propaganda. La mayoría de las veces de empresas del sector turístico, pero esta vez…»de cacahuetes»….
De vez en cuando me sigo pasando, pero la mayoría de veces me encuentro propaganda encubierta.
Vaya, David, de verdad no sabes cuánto siento que esa sea tu visión. Disculpa por conseguir un sponsor para grabar 10 días un documental de vídeo en India sobre tigres de Bengala, que el chico que lance la marca sea uno de mis mejores amigos y quiera apoyarme en un proyecto que te aseguro es muy ilusionante. Disculpa por querer ofrecer temas diferentes sin faltar a la esencia experiencial que este blog ha atesorado en una década. Sé que por mucho que te lo explique a lo mejor no lo vas a querer comprender. Y, de verdad lo siento.
Te aseguro que esta no es una historia para vender «cacahuetes» y que el tema del Comando Piraña dará que hablar. Te lo acabaré demostrando y espero verte volver al blog porque hayan temas que te gusten, que te sientas a gusto leyéndolos y viendo fotografías. No he dejado de contar viajes ni un momento. Y seguiré haciéndolo igual.
Un fuerte abrazo,
Sele