Los miradores más superlativos de la isla de Príncipe
Príncipe es mucho más que el segundo apellido insular de un pequeño país africano. Quien lleva a cabo un viaje a Santo Tomé y Príncipe lo sabe. En este lugar situado a 150 kilómetros al noreste de la isla grande de Santo Tomé, a la deriva en las aguas del Golfo de Guinea, emerge un idilio entre selvas vírgenes e impenetrables, un relieve montañoso modelado a capricho, playas salvajes de aguas turquesas y vetustas plantaciones de cacao de la época colonial. Príncipe representa la auténtica isla del tesoro, ese lugar de ensueño que supera las expectativas de tu propia imaginación. Y cualquiera de sus ángulos ofrece una vista a cada cual más sensacional.
Los visitantes que llegan a este remoto lugar suelen salir a la búsqueda de las vistas panorámicas de mayor espectacularidad desde las que contemplar y fotografiar la isla. Para ellos va dedicada esta selección de los mejores miradores con los que ver Príncipe a todo color.
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Miradores de Príncipe: En busca de las mejores vistas de la isla
Basta un núcleo elevado o mínimamente despejado para darse cuenta rápido de la majestuaosidad que emerge de los cuatro costados de la isla. De lo contrario la vegetación es tan abundante y espesa que cuesta hacerse a la idea de la hermosa voluptuosidad de este enclave habitado por poco más de 7.000 personas y cuyo tamaño es nueve veces inferior a Santo Tomé. En las dos ocasiones en las que he podido viajar al archipiélago de Santo Tomé y Príncipe he aprendido sobre algunos lugares desde los cuales tener una visión panorámica excepcional de la isla. Salvo en algún caso concreto, no son miradores preparados de manera específica para ello sino rincones o puntos estratégicos donde divisar los paisajes jurásicos de los que goza Príncipe. Si quieres conocerlos, toma nota de estos lugares, y no te olvides la cámara. Lo de emocionarse y demás, ya viene de serie.
Oké Daniel
Llegar es una quimera de barro y bambaleo con el jeep que ni siquiera aparece en los mapas. En Roça Sundy conocen bien este punto noroccidental de la isla desde el cual se obtiene una vista privilegiada (y en altura) de Baía das Agulhas y algunos de los mejores picos de Príncipe. Desde esta vieja plantación colonial convertida en uno de los mejores hoteles boutique del país, nos lo descubrieron porque, de lo contrario, jamás lo hubiésemos encontrado. No es un mirador al uso, sino una tímida explanada en medio de la foresta y de lo que parecen unos pequeños invernaderos. Pero las panorámicas que ofrece, sobre todo durante la media hora previa al atardecer, y durante la propia puesta de sol, son absolutamente de escándalo.
No me equivoco si digo que es asomarse a este lugar proporciona uno de los mejores momentos que vivir en la isla de Príncipe. Además, salvo el traqueteo en coche, no requiere esfuerzo ni caminata alguna.
Camino a Nova Estrela (y Terreiro Velho)
Para llegar a este mirador, que ofrece vistas de las costas suroccidentales de Príncipe, con el islote Boné de Jóquei destacado en una postal perfecta, hay que tomar la estrada (carretera) a Nova Estrella desde Santo Antonio, la pequeña capital de la isla. Cuando termina el asfalto se inicia un recorrido por un sendero de tierra roja y, aunque no hay una señal específica, resulta muy fácil de reconocer el punto desde el que muchos nutren sus fotografías de Príncipe.
Mi consejo es dejar aparcado el vehículo y caminar hasta entrar a la finca de cacao Terreiro Velho (permiten el acceso sin problemas), propiedad del italiano Claudio Corallo, probablemente el mayor productor del fruto del chocolate en todo el país y que vive en una mansión colonial desvencijada por la que se pasa (no tiene ni puertas ni ventanas) obligatoriamente. Este lugar lo descubrí en mi segundo viaje a Santo Tomé y Príncipe y debo decir que fue un agradable descubrimiento. Ahora entiendo que el italiano no necesite de ventanas ni nada que perturbe aquella visión privilegiada de la isla.
Mirador Belo Monte hacia Praia Banana
Rumbo al extremo nororiental de Príncipe. Tras traspasar la puerta de entrada a Roça Belo Monte, que junto a Roça Sundy está considerada como la más bella de la isla (también el hotel), no hay pérdida para llegar hasta un mirador con una pequeña balaustrada pintada de color salmón. ¿Y desde aquí qué es lo que se ve? Pues el frondoso y paradisíaco norte de Príncipe con una playa destacada que uno creería sólo existe en sus sueños. Se trata de Praia Banana (Banana Beach) apodada así por que desde arriba parece realmente un plátano. Delante aguas turquesas y limpias. Detrás… sólo selva. De hecho para acceder a dicha playa hay que atravesar un sendero en mitad del bosque o, mucho más fácil, ir en bote desde el islote Bom Bom (bajo demanda previa). Es raro ver una sola persona en este lugar. La imagen no puede ser más estupenda. No es de extrañar que Bacardi lo eligiera para un anuncio de televisión hace algunos años. Es la playa en la que cualquiera desearía perderse una temporada… y no corta precisamente.
Roça São Joaquim
En esta antigua plantación donde las casas coloniales permanecen en estado de ruina, engullidas por la vegetación y cuyos colores se pagaron hace mucho tiempo, vive apenas una comunidad que ronda el centenar de personas. Pero este enclave casi abandonado dispone con un balcón privilegiado al Parque Natural Ôbo (con las principales montañas a la vista) que los lugareños han aprovechado par instalar un pequeño mirador de madera y para el que no hay que pagar más que la voluntad de cara a su su mantenimiento. El turismo es escasísimo aún pero puede venir bien para una comunidad que lo necesita.
Baía das Agulhas en barco
No todos los mejores miradores de la isla de Príncipe están en tierra firme. Algunos requieren el uso de una embarcación (Desde Bom Bom, por ejemplo) para gozar de una perspectiva diferente. Aunque la misma que obtuvieron los navegantes portugueses que a finales del siglo XV arribaron a esta isla situada en pleno Golfo de Guinea. Porque en estos cinco siglos desde el mar es complejo apreciar diferencias de lo que sus primeros colonizadores pudieron atisbar en el horizonte. Príncipe, si no virgen por completo, ya que la habitan varios millares de personas, es uno de los últimos rincones absolutamente salvajes del planeta. Su esencia «Robinson Crusoe» permanece más viva de lo que cabría imaginar.
Desde Oké Daniel, el primer mirador al que hacía referencia, permitía asomarse desde una altura considerable al paisaje de picos de la profunda Baía das Agulhas (Bahía de las Agujas, en honor a las formaciones volcánicas profundamente erosionadas de la isla). En el segundo viaje de autor que pude hacer a las islas con los lectores de este blog(cuyo resumen se puede leer aquí) tuve la fortuna de que pudiéramos navegar por las aguas de esta bahía en un bote a motor que nos ofrecieron en Bom Bom. Y no sólo eso, sino también bañarnos con unas panorámicas que arrebatan la respiración.
Príncipe desde el avión a/desde Santo Tomé
No conviene olvidar que tanto la llegada como la partida desde la isla en avión (siempre con Santo Tomé de aliado, puesto que sólo se llega desde aquí) dejan unas vistas increíbles que permiten obtener una perspectiva completa de la orografía de Príncipe. Es un vuelo de apenas treinta y cinco minutos en un pequeño aparato de STP Airways. Por lo que la pregunta más lógica es… ¿DÓNDE UBICARSE EN EL AVIÓN PARA GOZAR DE LAS MEJORES VISTAS AÉREAS DE LA ISLA DE PRÍNCIPE? Y la respuesta sería:
- En el viaje de ida Santo Tomé – Príncipe lo mejor es colocarse en la última o penúltima fila de la derecha (mirando de atrás hacia delante). Asientos 11C o 10C ideales. Si vamos más adelante las alas cortan bastante la vista.
- En el viaje de vuelta Príncipe – Santo Tomé habría que hacerlo en la última o penúltima fila de la izquierda. Asientos 11A o 10A.
¿Te vienes conmigo a Santo Tomé y Príncipe?
En febrero hicimos el primer viaje de autor a Santo Tomé y Príncipe. Estamos montando otro viaje con los lectores y lectoras de El rincón de Sele para principios de diciembre de año y no descartamos realizar más en 2020. ¿Estáis interesad@s en recibir información en cuanto lo tengamos cerrado? En el caso de tener interés en formar parte de un nuevo viaje a Santo Tomé y Príncipe y veniros conmigo en en la próxima edición podéis mandarme un correo a la siguiente dirección:
Por favor, indicad expresamente en asunto QUIERO IR A SANTO TOMÉ Y PRÍNCIPE CON SELE y, en el momento de tener perfilado el programa, fechas y precios, os informaría al respecto. Por supuesto, vuestras direcciones de e-mail las guardaré exclusivamente para este asunto de los viajes de autor. Quién sabe, quizás sea yo el que os muestre en persona estos miradores superlativos de Príncipe, así como muchos otros secretos de las islas.
El viaje que sí está cerrado es BUTÁN (salida única: 13 de octubre , aún quedan plazas) y en agosto marchamos a llevar a cabo la ansiada Expedición Kamchatka (se agotaron todas las plazas en unos pocos días).
Espero haber atinado con las mejores vistas (accesibles) de la isla de Príncipe. Ojalá en próximos viajes a este destino pueda descubrir otras nuevas.
¡Salud y viajes!
Sele
+ En Twitter @elrincondesele
2 Respuestas a “Los miradores más superlativos de la isla de Príncipe”
Coincido toatlmente contigo.
Uno de los mejores destinos exitentes en los que dudas que deba ser más conocido o se quede como está.
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