Te propongo venir conmigo al último paraíso africano, a recorrer un archipiélago en el que todo es selva virgen, donde coleccionan playas de anuncio y plantaciones de cacao y café. Un pedacito varado en las aguas del Golfo de Guinea donde quienes aman el noble arte de viajar se sienten bien recibidos, se sienten seguros. Te animo a emocionarte con los paisajes de Parque Jurásico, pero bajo el son de los tambores y la danza de un pueblo descendiente de esclavos que fala portugués y sonríe a las primeras de cambio. O con el vuelo de decenas de aves de colores y el caminar lento de una tortuga antes de enterrar sus huevos en la arena. Allá donde los troncos dilatados de los baobabs reciben el soplo de la brisa marina y las palmeras hacen reverencias al sol cada atardecer. Quizás se convierta en la sorpresa de tu vida como lo fue de la mía. Quizás te apetezca venirte conmigo de viaje a Santo Tomé y Príncipe.

Una única salida del 3 al 14 de julio de 2022 y muy pocas plazas para ponerle color a un viaje muy especial. Vamos a formar un equipo en el que son bienvenidas todas aquellas personas que disfruten de rincones del mundo poco transitados y que tengan ganas de caminar por el profundo bosque nublado, bañarse en aguas turquesas, ver desovar a inmensas tortugas marinas y gozar de paisajes de otro planeta mientras saborean una deliciosa taza de café. Y todo sin prescindir de la confortabilidad de un alojamiento acogedor y el sabor de la buena mesa con amalgama de frutas tropicales y pescado fresco. ¿Te apuntas? 

La ruta a Santo Tomé y Príncipe para julio de 2022

Desde que descubriera «mi lugar en el mundo» he compartido en este blog muchos lugares, momentos y sensaciones de ese país llamado Santo Tomé y Príncipe. Tres años han pasado ya del primer gran viaje a Santo Tomé y Príncipe. Fue mi primera prospección a un destino de la mano de Pangea, mi nuevo amigo dentro de un proyecto basado en viajes de autor a rincones del mundo poco trillados. Y regresé cargado de ideas para volver algún día con más personas a un destino que apuesta por un crecimiento turístico basado en la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, así como a las tradiciones locales. Si algo tenía muy claro era que, si alguna vez lo lograba, sería de la mano de grupos muy reducidos, casi como el que viaja con amigos de toda la vida, porque Santo Tomé y Príncipe no es uno de esos países a los que viajar en autobús y correr como pollos sin cabeza. Más bien, es todo lo contrario.

En 2019 tanto en febrero como en diciembre pude cumplir ese sueño. Juntamos a dos grupos de excelentes personas que aman viajar y que regresaron siendo amigos tras disfrutar de un destino cuyas expectativas se pueden poner todo lo altas que uno quiera porque la realidad siempre las supera. Quedó un viaje de autor a Santo Tomé y Príncipe repleto de momentazos compartidos. Navegamos por aguas cristalinas, también nos bañamos en ellas, conocimos las viejas haciendas de cacao e incluso pernoctamos en algunas, vimos partir al mar a decenas de tortugas recién roto el cascarón (y con el segundo grupo el desove de cuatro grandes tortugas), gozamos de los mejores miradores de Príncipe y surcamos un laberinto de manglares en canoa. Pero, sobre todo, formamos dos equipos tan heterodoxos como compenetrados.

Con el grupo de febrero de 2019 en la isla de Santo Tomé.

Con el grupo de diciembre de 2019 en la isla de Príncipe (Mirador de Nova Estrela).

Desde entonces mucha gente pidió reeditar una nueva aventura a las islas. Pero 2020 la pandemia nos cerró todas las puertas. Aunque ya puedo confirmar con mucha ilusión que volvemos al paraíso este mismo verano. Y necesito para esta nueva andadura gente como tú que va en busca de lugares nuevos que le sorprendan (Santo Tomé y Príncipe aparece cada año en los primeros puestos de los países menos visitados del planeta). Gente enamorada de África (incluso sin haber estado antes) y que desee acceder a ella por una puerta poco corriente pero sumamente amable. Personas entusiastas de la fotografía de naturaleza y de rostros humanos pero que también deseen indagar más allá de sus retratos. Que disfruten tanto de una sonrisa ajena como del momento en el que una tortuga rompe la cáscara del huevo para dirigirse al mar nada más nacer. Busco gente, en definitiva, con ansia de viajar que sea (o desee ser) dueña de su propia vida. En realidad te estoy buscando a TI.

Así será el viaje a Santo Tomé y Príncipe

Ante todo, vuelvo a incidir en la fecha de partida, el 4 de julio (domingo) y en que estaremos de vuelta en origen el 14 de julio (jueves). Y sólo habrá once plazas disponibles (aunque a día de hoy ya quedan menos). Si algo tengo claro desde que inicié este proyecto de viajes de autor es que quiero grupos pequeños, puesto que permite flexibilidad en las rutas y algo que me fascina… IMPROVISAR. Más en un país como en África donde el mejor sitio para tener el reloj es en el bolsillo.

La idea es recorrer muchos de los sitios (todos no es posible) que ya mencioné en la guía de lugares increíbles que ver en Santo Tomé y Príncipe, incluyendo no pocas sorpresas y añadidos. Poniendo nuestras bases (alojamientos) en la capital (Santo Tomé), en cabañas al sur de la propia isla de Santo Tomé (Praia Inhame) junto a una playa estupenda, en una roça en Sao Joao dos Angolares y, por supuesto, en Príncipe, el colofón final en un lugar que aseguro deja sin palabras. Tratando de visitar juntos muchas maravillas, pero dejando tiempo y posibilidades para descansar, relajarse, darse un chapuzón o volvernos locos fotografiando todo lo fotografiable (que no es poco). Puedes leer aquí la ruta al detalle (itinerario del día a día en Santo Tomé y Príncipe).

¿Quieres saber algunos de los momentos más destacados que podremos vivir en este viaje? 

– Nos encomendaremos a la fortuna para que la niebla nos permita ver (y fotografiar) el Pico Cão Grande, una larga y puntiaguda chimenea volcánica que emerge de la maraña selvática durante unos 300 metros y muy pocas personas han sido capaces de escalar por ella. Uno lo paisajes más deseados por quienes viajan a Santo Tomé y Príncipe.

– En la isla de Príncipe iremos a los mejores miradores para degustar la belleza jurásica de la gran joya natural del Golfo de Guinea.

– A diferencia de los viajes anteriores (en invierno, que es periodo de desove de tortugas marinas), llegamos en el momento álgido para poder avistar ballenas. Julio y agosto son los meses en que una importante población de ballenas jorobadas acude a las costas de ambas islas para criar y alimentarse antes de poner rumbo a las frías aguas antárticas.

– Visitaremos algunas de las viejas roças o haciendas desde las cuales durante la época colonial (y muchas en la actualidad) se dirigían las plantaciones de cacao y café. Algunas están prácticamente abandonadas, mientras que en otras se encuentran en pleno funcionamiento. Aunque en esta ocasión la comunidad está involucrada en su éxito, lo que hace que sea una de las fuentes de prosperidad de un país lleno de posibilidades.

De hecho no sólo comprenderemos el significado de las roças en Santo Tomé y Príncipe sino que además pernoctaremos en dos de ellas, con unas vistas formidables al océano.

– Buscaremos distintas especies de plantas y animales, sobre todo aves, tratando de entender la biodiversidad y el endemismo de Santo Tomé y Príncipe. Un lugar en el que Darwin hubiese también suspirado y encontrando inspiración para su teoría de la evolución. ¡Birdwatchers welcome!

– Nos mezclaremos con la gente local, casi siempre proclive a charlar con los foráneos y pasar un rato agradable. Que nadie tenga duda de que Santo Tomé y Príncipe, muy por encima de los increíbles paisajes es LA GENTE MARAVILLOSA que habita las islas. El mejor recuerdo de todos tendrá lugar en las aldeas y en los senderos donde viviremos momentos muy especiales.

– Pondremos nuestros pies (y nos bañaremos si la ocasión lo permite) en playas solitarias que uno creería haber visto sólo en postales, revistas de relumbrón y fondos de pantalla del ordenador. Algunas de las mejores playas del mundo se encuentran en Santo Tomé y Príncipe.

– Atravesaremos la línea ecuatorial que divide a nuestro planeta en dos hemisferios. Eso sucede en el islote de Rolas, donde pasaremos una noche en su único y exclusivo hotel. Quien lo desee, se podrá unir para atravesar el palmeral para llegar a las calas del sur o ver despedir el agua del océano cual géiser en un bufón de origen volcánico. O simplemente relajarse sin más en la piscina mientras disfruta de las vistas de Santo Tomé, que está justo al otro lado (cuando está despejado se ven el Pico Cão Grande y el Pico Cão Pequeno).

– Disfrutaremos de hoteles con encanto de diferente tipología. Desde una cabaña frente al mar desde donde dormirse escuchando las olas y darse un baño antes del desayuno a un hotel boutique con habitaciones de revista en una antigua hacienda colonial con vistas a la selva. Se trata de alojamientos muy seleccionados donde, además, la comida es estupenda.

¿Cómo formar parte del viaje a Santo Tomé y Príncipe?

No dudes en pedirme información para conocer más detalles sobre este viaje (fechas concretas, itinerario, precios de partida, etc.) y conseguir tu plaza.

En el caso de que tengas interés por este destino, escríbeme directamente con total confianza. Pero, como ya te he comentado antes, no quedan demasiadas plazas, salimos en apenas un mes y estoy convencido de que, tal como ha sucedido en los anteriores viajes, estas pueden tardar poco en desaparecer.

Y ya sabes, puntualmente voy publicando todos los viajes de autor que voy a ir organizando de la mano de Pangea.

UN PROYECTO DE VIAJES DE AUTOR CON PANGEA THE TRAVEL STORE

En las próximas semanas iré publicando novedades tanto en el blog como en las redes sociales Twitter, Facebook e Instagram. T

¿Nos veremos en Santo Tomé y Príncipe este mismo verano? ¡Yo espero que sí!

Sele

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